Absolutamente todos tenemos un potencial que desarrollar en busca de alcanzar el máximo posible. Todos tenemos la habilidad de hacer un poco más cada día de lo que creíamos realizable. Esto puede ser en el trabajo, en nuestras relaciones personales, familia, deporte, salud y casi que en cualquier situación que requiera tu atención o interés.
Sería maravilloso si con solo chasquear tus dedos se liberara tu máximo potencial, pero la realidad es que si quieres abrir las puertas de tu excelencia se requiere seguir algunos pasos hacia el auto desarrollo.
Desarrollar la mentalidad y la motivación para incrementar la confianza en ti mismo y la decisión de tomar acción para tu crecimiento y superación es la clave.
Tenemos dos opciones, quedarnos donde estamos o descubrir lo que realmente podemos alcanzar en la vida si nos cuestionamos frecuentemente nuestra realidad presente.
Pregúntate:
• Cuál será el impacto en tu vida si las cosas se quedan como están, si no hacemos nada diferente? Probablemente ninguno, seguirás donde estás.
• Cómo sería tu vida si te comprometes a crecer y mejorar para cambiar tu situación actual?
Cuál de las dos respuestas sería más retadora y podría generar un mayor impacto positivo en tu vida? Evidentemente la segunda.
Debes proceder a borrar de tu vida todos los hábitos y creencias que te mantienen atado donde estás si quieres dar un cambio de timón a tu situación actual y avanzar hacia mejores horizontes liberando tu máximo potencial.
Estar consciente de tus malos hábitos es el primer paso para proceder a eliminar los pensamientos y comportamientos que no te permiten alcanzar tu máximo potencial.
La próxima vez que te encuentres pensando “no puedo”, “no soy bueno en eso”, o estés tomando la decisión de no emprender una ruta diferente, piensa en cómo estos pensamientos o hábitos te afectan negativamente y supéralos.
Imagina lo que sucedería si poco a poco llevas tu vida a cambiar esos pensamientos negativos en positivos y paso a paso abandonas tu zona de confort en busca de nuevas oportunidades que mejoren tu vida.
Ponte metas, crea tu propia felicidad, si estás aburrido con tu vida, si no te levantas cada mañana con un ardiente deseo de hacer cosas, es porque no tienes metas claras.
La mayoría de nosotros hemos estado en esta situación en algún momento de nuestras vidas, nos hemos sentido un poco estáticos, sin dirección ni objetivos que nos mantengan motivados.
Hay una línea directa entre la obtención de las metas que nos proponemos y la realización personal. Definir objetivos y programar una ruta de acción es lo que hace la diferencia entre los que nada más van por la vida y aquellos que mandan en su vida y explotan su máximo potencial. Atrévete a sentir esa gran satisfacción que se genera cada vez que logras alcanzar tus metas.
Escribe tus metas, define las actividades que debes realizar para alcanzarlas y mide frecuentemente tu avance.
Recuerda, potencial es la posibilidad que todos tenemos dentro para desarrollar nuestra máxima capacidad de alcanzar resultados.
Las limitaciones en lo que podemos hacer y lograr generalmente son auto impuestas. Libera tu potencial.