Las clases son como los entrenamientos en el fútbol, se debe entrenar mucho para ser un mejor jugador.

Los maestros son como los entrenadores, unos son buenos y te aprecian, otros son como el diablo y te odian, pero tienes que aceptarlos y adaptarte porque son los que deciden si juegas o no.

No juegas todos los días, pero sí debes entrenar todos los días para estar bien preparado y en condiciones de jugar cuando sea necesario.

Si quieres sobresalir entre tus compañeros de equipo, debes dedicar tiempo extra para prepararte física y mentalmente mejor que los demás.

Tu actitud será siempre la clave de tu éxito.  Si piensas que entrenar  e ir clases es muy aburrido nunca serás parte del equipo titular porque son aquellos que se esfuerzan más en los entrenamientos los que se ganan el derecho a ser los titulares.

En ambos casos hay reglas y castigos por no poner atención o por dar el mínimo esfuerzo.

Los juegos como los exámenes van a medir tu preparación y si no sacas buena nota vas a ir a la banca o hasta puedes quedar fuera del equipo.

Tanto las clases como el fútbol te convierten en una mejor persona y en un mejor jugador para cualquier equipo.

Siempre debes tener y cuidar tanto tu uniforme como las herramientas necesarias para desarrollar un buen trabajo, aún en los entrenamientos.

En ambos tendrás una posición que jugar y ten seguro que los mejores jugadores y estudiantes son los que participan más, en el fútbol ya te miden cuanto corres y cuantos pases buenos das, además de las anotaciones, igual que en el estudio todo debe ser medido para que pueda ser mejorado.

Así que la mejor manera de estar bien preparado es ver las clases y entrenamientos como algo divertido pero tomándolo con seriedad y responsabilidad.

Antes de cada juego o examen debes estar bien preparado, con tiempo y sin prisas, con todo debidamente estudiado y con todas tus herramientas listas.

Nada es aburrido si sabes que poner atención y mostrar interés te pueden convertir en la estrella del equipo.

Hasta las más grandes estrellas requieren de un entrenador para formarlos, mejorar y competir.

Estudiar y entrenar te mantendrán lejos de los vicios que pueden echar a perder tu vida.

Nunca olvides que un buen estudiante tiene muchas más probabilidades de ser exitoso que un buen deportista y que si haces las dos cosas con seriedad serás una persona mucho más saludable y feliz.

Así que si te gusta el fútbol debe gustarte también ir a clases.